ORACIÓN A LA VIRGEN MARÍA DE RAIFFERSHARDT

ORACIÓN A LA VIRGEN MARÍA DE RAIFFERSHARDT
Oración a María: Amada madre envuélveme con tu manto amoroso y ruega por mi ante el Trono del Eterno para ser feliz y tener abundancia de todo lo bueno para cada día de mi vida. Amén

viernes, 19 de noviembre de 2010

El Papa y la laicidad española

Parece ser que el Papa de la Iglesia Católico-Romana en el famoso avión que lo había de llevar a Barcelona para consagrar el templo de la Sagrada Familia, le comentó a un periodista que España en cuanto a la religión se encontraba al mismo nivel que en los años treinta ... (momento en el que se llegaron a matar a sacerdotes) independientemente de lo sorprendentes, falsas e inoportunas que son estas declaraciones, me llama la atención una cosa.

Lo bueno, como siempre, es tirar pelotas fuera y ver la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Si se tomaran las declaraciones de Benedicto XVI en serio, entonces el propio Pontífice Romano debería hacer una seria y meditada reflexión acerca de la responsabilidad que el mismo Papa, como cabeza visible de la Iglesia Católica, y la propia Iglesia en sí, tienen en el surgimiento de este laicismo, o mejor dicho, en la proliferación de una apatía en las personas que, si bien no saben hacia dónde se dirigen, sí tienen claro hacia dónde no quieren dirigirse o dónde no quieren estar, que es en la Iglesia Católica, a no ser, evidentemente que las cosas cambien mucho.

La Iglesia Católica tal y como actúa por desgracia, y a salvo de honrosas excepciones que viven el camino mostrado por Jesús,  se aleja mucho del mensaje original dado por Cristo (en mi opinión, el primer comunista auténtico, desde hace 2.000 años).

Es una pena porque en el cristianismo original se hallan bellos ejemplos de cómo deberíamos vivir el amor, la libertad y sobre todo la ausencia de pecado, invento creado por ciertos "dirigentes" de la Iglesia Católica para someter a través del miedo a las personas de buen corazón, es decir, a los auténticos seguidores de Cristo. Y luego ... uno se extraña de que el tercer mensaje de Fátima dado a los pastores sea (y ello dicho por el propio Benedicto XVI en el avión que lo llevaba precisamente a Fátima) que Satanás se instaurará incluso en los puestos más altos de la Iglesia Católica ...

Información a nivel espiritual

He recibido un comunicado de la Iglesia Cristiana Esenia en el que se dice que el día 1 de diciembre de 2010 aparecerá en internet una información sorprendente a nivel espiritual. Creo que por el momento ni tan siquiera en la propia web de la Iglesia aparece la información.

martes, 16 de noviembre de 2010

Un ángel me ha dicho

Hoy, un ángel me ha dicho que está a mi lado...
Hoy, ese ángel me ha dicho que Dios está conmigo ... y en mi.
Hoy, ese ángel me ha dicho que Dios está en mi y que yo soy en Él.
Hoy, ese ángel me ha dicho que todos somos Uno, en Dios.
Hoy, estoy feliz porque sé que soy uno con Dios y uno contigo.
Hoy, siento una amorosa unión con Todo,
Hoy reconcozco que el Todo es Uno y que en ese Uno soy yo.

El ciego y el sordo (Dedicado a Leo Tolstoy)

Una vez un ciego y un sordo iban hacia una vereda vecina para conseguir guisantes. Entonces el sordo le dijo al ciego: "tú escuchas lo que pasa, y me lo cuentas, yo miro lo que pasa y te lo cuento".

Cuando entraron en el campo de guisantes se detuvieron. El ciego palpó los guisantes y exclamó "¡Están crecidos!" y el sordo le preguntó: "¿Qué pasa?". Entonces el sordo tropezó contra una cerca y se cayó. El sordo le preguntó: "¿Qué pasa?". Y el ciego respondió: "Ah, esta cerca". Entonces el sordo dijo: "¿Está cerca? ¡Pues corramos!", y se lanzó a correr.

TOLSTOY, Leo. El ciego y el sordo. Cuentos.


La única persona verdaderamente sorda es aquella que no quiere escuchar, pues incluso un sordo que quiera entender hará todo lo posible por comunicarse. No hay más ciego que el que no quiere ver, porque una persona que tenga una limitación en el sentido de la vista si quiere puede "ver" a través de los otros sentidos, desarrollando incluso una especie de visión interna.

Sin embargo, respecto de las personas que tienen todos los sentidos a su disposición pero que no quieren usarlos para descubrir la verdad no puede hacerse nada. En estos casos la persona internamente sabe o puede saber fácilmente cuál es la causa de sus males pero no quiere verlos, quizá por el dolor que le pudiera producir el reconocimiento de la situación, quizá por los cambios que debería realizar en su vida, todos tenemos en realidad un variado repertorio de "quizás" que nos "protegen" del dolor para mantenernos en una aparente armonía.

En esas situaciones tan sólo cabe confiar en que Dios y sus ángeles sagrados guíen a esa persona. Pues el que no quiere ver o no está preparado para ello necesita su tiempo para madurar ya que de lo contrario, también es cierto que se arrancaría la planta antes de que diera fruto, y ello sería totalmente incorrecto. Es en estas situaciones, que se dan generalmente con las personas queridas, como los hijos, la pareja, las amistades o los padres, donde debemos recordar que el amor sin premisas ni restricciones, el amor sin condiciones, el verdadero amor, el incondicional, ha de brillar más que nunca, para, desde el silencio, ayudar a quién lo necesite a fin de que pueda encontrar el camino y dar los pasos adecuados en su vida. En estos casos la ayuda puede ser variopinta desde dar un consejo a rezar por el otro, en el silencio de nuestra intimidad, dejando ante todo que la persona siga su propio proceso personal fruto de su libertad de elección que, de buen seguro, lo conducirá de vuelta a las verdes praderas en las que Dios nos aguarda paciente y con alegría.

No es algo fácil, cuando existe el amor hacia otra persona, pero el amor, a veces es suave y otras, bajo una muy distinta apariencia, es duro, pareciendo incluso desde el mundo de las apariencias que la actuación que se ha tenido con el otro nada tiene que ver con el amor. Sin embargo, a veces cuanto más alejado parece que se está es cuando más cerca se está de uno pues la distancia física es medible físicamente pero la unión en el amor va más allá de toda medida humana.

Ver desde el otro lado como una persona querida va por un camino pedregoso es algo doloroso pero ha de aceptarse, al no haber nada malo en ello, por ser el camino escogido la libre elección de la persona. En estos casos, ha de tenerse la confianza en que Dios está con todos nosotros y que Él se ocupa de que cada uno de nosotros seamos felices y encontremos nuestro propio sentido y camino en la vida hacia Él.

jueves, 4 de noviembre de 2010

La libertad: ¿una limitación divina?

Dios es nuestro Padre y como tal siempre está a nuestro lado, apoyándonos, animándonos, ayudándonos y sobre todo amándonos. Tan sólo hace falta un acto tan sencillo como pedirle ayuda para que Él se ponga inmediatamente en camino para acudir en nuestro auxilio. Así es Él, la lástima es que nos lo hayan pintado de otra forma, pero que lo pinten de otra forma no significa que sea así. Hemos de tener confianza en que Él nos ayuda y en que por encima de todas las cosas, al ser sus hijos, quiere que seamos auténtica y plenamente felices en nuestra vida, todo lo que no sea seguir este camino, en realidad es algo no deseado por Dios.

Entonces, a uno le surge la pregunta de porqué entonces lo permite. La respuesta es sencilla, de los males de la humanidad tan sólo existe un único responsable, el ser humano. Dios nos ha dado el mayor don que se puede dar para decidir y actuar, este Don es la LIBERTAD. Con ella podemos decidir convertir la Tierra en un paraíso lleno de alegría, unión con los demás, felicidad, ... o en un auténtico y tremendo infierno presidido por el egoísmo. Esa es nuestra elección. Si realmente Dios es nuestro Padre sin límites ni limitaciones, si en Él está el Amor, cómo podría un padre amoroso hacer daño a su hijo...

El castigo divino es algo que alguien nos ha "vendido" porque el miedo produce sumisión y esa sumisión conlleva una pérdida de la propia libertad, una limitación en nuestra vida y que ese otro ser humano, un igual a mi, diga lo que yo tengo que hacer en mi vida bajo la pena de un castigo si no lo hago es algo sospechoso. Sin embargo, si nos consideramos hijos de Dios, nuestro mayor don como he dicho, es la libertad, y los hijos libres de Dios no están sometidos a los otros sino unidos a ellos a través del amor hacia uno mismo, hacia los demás y hacia Dios. Una persona tan sólo puede ser limitada en su vida, en sus acciones si esa misma persona desea que así sea, yo sólo acepto un regalo si así lo deseo, sino el regalo es tuyo. Por tanto, alguien tan sólo puede ejercer presión en nosotros si nosotros permitimos que esa presión se ejerza en nosotros, ya que esa curiosamente en nuestra libertad, aceptarla o no.

Dios es apertura, expansión, actividad verdadera, amorosa e incesante. Si realmente Dios no quiere someternos y ama nuestra libertad por encima de todo, al ser algo maravilloso porqué nosotros hemos de limitarla con nuestras propias restricciones o con imposiciones de los demás... porqué auto-limitar nuestro Ser si el mismo Dios, Aquél que lo sabe todo, no lo hace; seamos verdaderamente libres, en ese elemento reside nuestra verdadera fuerza como hijos de Dios, pues el límite está en uno mismo y por tanto la limitación de nuestra propia fuerza y vida la elige y acepta uno mismo, al aceptar que la opinión limitante de otros respecto de nosotros es más correcta que la nuestra propia o al tener la persona una imagen sesgada de sí misma y de su verdadera fuerza. Por tanto, aceptemos nuestra fuerza, empezando por amarse cada uno a sí mismo, tanto en la parte de luz como de oscuridad, y con esa aceptación de uno mismo hagamos el camino hacia la libertad interior, seamos verdaderamente libres ... a imagen y semejanza de Dios.